dc.contributor.author | Salazar, Boris | |
dc.date.accessioned | 2017-05-26T20:31:08Z | |
dc.date.available | 2017-05-26T20:31:08Z | |
dc.date.issued | 2017-05-26 | |
dc.identifier.uri | http://hdl.handle.net/10893/10254 | |
dc.description | Crítica de libro | spa |
dc.description.abstract | Debieron pasar más de sesenta años para que un economista eminente, Dani Rodrik, descendiera desde la cima de la teoría a la llanura metodológica para contarnos en qué consiste la actividad científica de los economistas. No lo hizo con la brutal audacia de su ilustre predecesor Milton Friedman, a quien le bastó un ensayo para destruir las relaciones tradicionales entre teoría y realidad empí- rica que dominaban la metodología de la economía, al postular que el realismo de los supuestos era irrelevante para evaluar la validez de las teorías económicas.
Si el ensayo de Friedman (1953) era una dura polémica contra los devaneos realistas de los críticos de la economía marginalista o neoclásica, el libro de Rodrik (2015) es una elegante confesión de lo que los economistas hacen todos los días, pero nunca se habían atrevido a decir por escrito. Como toda confesión, dice cosas que todo el mundo sabía, otras apenas sospechadas por los expertos y unas cuantas sorprendentes para todos. | spa |
dc.language.iso | spa | spa |
dc.subject | Teoría economica | spa |
dc.subject | economistas | spa |
dc.title | La confesión de un economista | spa |
dc.type | Otros | spa |
dc.rights.accessrights | info:eu-repo/semantics/openAccess | spa |
dc.type.coar | http://purl.org/coar/resource_type/c_1843 | spa |
dc.type.content | Text | spa |
dc.type.driver | info:eu-repo/semantics/other | spa |
dc.type.version | info:eu-repo/semantics/publishedVersion | spa |
oaire.version | http://purl.org/coar/version/c_970fb48d4fbd8a85 | spa |
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